El xoconostle es un fruto nacido del nopal similar a la tuna. Tiene un sabor ácido que le otorga una característica especial. Parte de la gastronomía ancestral mexicana, el xoconostle es rico en vitaminas A, C y K y en minerales como el calcio, magnesio hierro y potasio. Además ayuda a reducir los índices de triglicéridos, colesterol y a controlar la glucosa.
Debido al aumento de la ingesta de productos chatarra, un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) ha aprovechado las propiedades del xoconostle, creando botanas a partir de este exótico alimento.
Nicté Álvarez Castro, investigadora y líder del proyecto, señaló que para fabricarlas se necesita liofilizar el xoconostle, proceso en el cual se congela y se introduce a una cámara de vacío para eliminar el agua, lo que resulta en un producto listo para el consumo.
En una investigación realizada con el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INNSZ) se comprobó que la botana controla los niveles de colesterol y triglicéridos en quienes consumen una porción de 200 gramos de producto liofilizado de Xoconostle.
También se hizo una prueba con niños de entre 12 y 14 años; de la muestra de 100 menores, 94 expresaron que la volverían a consumir porque se les hacía agradable al paladar. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señalan que México es el cuarto país consumidor de chatarra y el primero en América Latina, debido a que una persona ingiere en promedio 212 kilogramos de esta por año.
La UACh bajo la marca Productos Nutracéuticos Chapingo ya está comercializando sus productos y buscan desarrollar un mercado cautivo a través de los desayunos del DIF de cada municipio, con quienes se planea crear un acuerdo para distribuir los productos nutracéuticos.