Quizá lo desconocías, pero muchas de las películas más importantes sobre el viejo oeste, y que hicieron del cine estadounidense uno muy popular, fueron filmadas en el estado de Durango, México.
Aunque luego de la conquista los territorios de la Nueva España estaban delimitados, la realidad es que las fronteras como tales eran apenas imaginarias, en el sur de Estados Unidos y en el norte de México las culturas se asemejaban, y naturalmente el clima y ecosistemas también.
Por ello, los tradicionales paisajes del viejo oeste forman parte de la estética natural del estado de Durango y desde los años 50 dos poblados han servido de locaciones para rodar más de 150 películas. Se encuentran a solo unos kilómetros de Durango y se llaman Villas del Oeste y Chupaderos; dos pueblos de calles polvorientas donde abundan los vaqueros, las cantinas, sheriffs, bailarinas de cancán: escenarios de una gran cantidad de películas del género western que vieron pasar al legendario John Wayne.
Todo comenzó cuando en 1898 se filmó un corto llamado Un Tren Llegando a Durango, luego un director llamado Raúl Wash pidió al revolucionario Francisco Villa actuar en una película y usó a Durango como locación, entre otros estados. Más tarde, sobre todo en los 60´s, directores como John Houston, Raoul Walsh, Chano Urueta, Raúl de Anda, George Sherman y Sam Peckinpah filmaron en estos pobladose.
Como largometraje, el primero en filmarse fue La ley del bravo, en 1955, protagonizada por el actor estadounidense Robert Wagner. De las más recientes, en 2004 Penélope Cruz y Salma Hayek filmaron Las Bandidas.
*Imágenes: 1) mexicodesconocido.com.mx; 2 y 3)micasasuchil.com; 4) cartademexico.com