La tradición gráfica en México alcanzó un notable auge a finales del Siglo XIX con grabadistas como José Guadalupe Posada, quien consiguió crear íconos populares desde arraigadas cosmovisiones, como en el caso de la relación del mexicano con la muerte.
Esta tradición se diversificó y llegó a sus epítome en los años 40´s gracias a la invención de la litografía en el siglo XIX que permitió la afloración de carteles con temáticas de muy distintas naturalezas.
En esta entrega hacemos un recorrido por la historia de los carteles en México. Ellos, por su cualidad de calle, puestos ahí al alcance de todos, encontraron un acogimiento casi natural. El cine (pese a que se encontraba el país en una difícil situación económica), la política, el espectáculo, y más tarde los deportes como el box o la lucha libre, encontraron en este formato una manera de pertenecer a las masas desde una gráfica que resonaba con la psique colectiva.
En los carteles que a continuación presentamos, hallamos también al México que se promocionaba turísticamente, por primera vez, en el mundo. El siglo XX, con sus aires de modernidad que exaltaba lo mejor del país hacia un mundo globalizado, encontraba grandes promesas naturales y culturales en México.
Los carteles, aunque silenciosamente, fueron y siguen siendo creadores de la identidad colectiva. Desde sus diseños que resuenan, los sentimos parte de la cultura, quizá mayormente por pertenecer al espacio común por excelencia: las calles.