Las tortillas tienen una dimensión sagrada. Aunque casi nunca las tratamos desde ese lugar, porque nos parecen perfectamente cotidianas. Pero, pensemos que, tal vez, este sencillo alimento es la única cosa que tenemos en común todos los mexicanos. Eso debe ser una cualidad mística.
Aunque una tortilla, entre todas las del mundo, ha sido, desde que salió del comal, motivo de adoración, polémica, misterio y otras pasiones. Se trata de la tortilla en la que se apareció el rostro de Jesús. Y no, no estamos hablando de un "mito urbano", sino de un acontecimiento —divino o no— que marcó para siempre la historia de una familia mexicana al otro lado de la frontera.
La historia es muy peculiar y siempre es contada con asombro o entre risas; pero, recientemente, la revista Eater publicó la versión de Angélica Rubio, hija de la mujer que puso al comal la tortilla más famosa del mundo.
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Cristo en el Comal
"Mi madre fue la primera persona en descubrir la cara de Jesús en una tortilla —haya sido o no una señal de Dios, esto cambió nuestras vidas." Fue en octubre de 1977 cuando María Morales Rubio —mujer que había migrado junto a su esposo desde Ojinaga, Chihuahua hasta Lake Arthur, New Mexico en 1950— estaba haciendo el desayuno (burritos de tortilla de harina, frijoles, huevos y chile verde) cuando descubrió en una de sus tortillas una mancha muy particular.
Era "pequeña, pero inconfundible", describe Angélica, y la devoción católica de María lo confirmó inmediatamente: la quemada en la tortilla tenía la forma exacta del rostro de Cristo. "Hasta este día, mi mamá no puede describir exactamente lo que sintió —escalofríos y una combinación de ‘extraña, alegre y con miedo’— pero, más que nada ella experimentó un llamado profundo a quedarse con la tortilla."
Y así lo hizo. Rápidamente el chisme se corrió por todo el pueblo y el siguiente día ya había cientos de personas formadas, esperando para ver el milagro, "buscando creer en algo". La familia terminó por construirle a la tortilla una pequeña capilla, donde reside junto a imágenes de la virgen y otros iconos sagrados que los cientos de visitantes van a depositar junto a ella.
El asunto se transformó en un fenómeno del que probablemente ya habías escuchado. En Estados Unidos, Oprah Winfrey habló de él en un programa suyo, fue referenciado en un capítulo de Los Simpson, y en 2005 se estrenó una película extrañísima que se llama "Tortilla Heaven", que retrata hiperbólicamente esta historia. Cientos de personas han encontrado a Jesús en sus comidas. ¿Pero habrá un significado superior a la aparición?
La tortilla es sagrada porque es un punto de anclaje para la identidad
"La historia, por ridícula que sea, es realmente significativa para mi familia." En muchos sentidos el proceso de migración había tenido efectos adversos sobre los Rubio, pero la tortilla refrescó mucho las cosas y ayudó a que encontraran su lugar en este terreno indescriptible que es la frontera permanente que habitan los migrantes.
Para Angélica Rubio (hija menor de la familia), la tortilla era, por otro lado, un extraño motivo de vergüenza y enojo. Le molestaba profundamente cómo se explicaba la historia en la cultura popular y que se entendiera a su familia a través de estereotipos nefastos (como los que se aprecian en "Tortilla Heaven". Pero al final, la tortilla se transformó en un punto de anclaje para su identidad y un recordatorio sobre lo que ella es y quiere construir con esa posibilidad.
Angélica termina su genial texto diciendo: "Hoy me desempeño en la legislatura estatal de New Mexico, que representa a la ciudad fronteriza de Las Cruces en la trinchera de los desafíos que enfrentan nuestras comunidades a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos. Cada vez que tengo la tentación de perder la esperanza, la vuelvo a encontrar pensando en cómo mi madre recuperó la suya a través de una milagrosa quemada en una tortilla a mano recién hecha."
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