La mexicana Mariana Lorenzo tiene solo 23 años y sus ilustraciones son un deshago para muchos. Es más conocida como Mar Maremoto y su enternecedora estética irrumpe con mensajes-espejos de emociones que quizá reprimimos.
Su trabajo, sencillo y conciso, nos muestra la fragilidad en la que todos vivimos. Sí, muchos días, todos, nos sentimos apunto de desmorarnos, como un mazapán.
“Desde chiquita el único dulce de los puestitos que me gustaban son los mazapanes. Me encantan y siempre intentaba comerlos sin deshacerlos”, me dice.
En sus ilustraciones este dulce mexicano la ha inspirado a hacer una revisión de la fragilidad que tienen muchos de nuestros prejuicios como sociedad:
“En el caso de la masculinidad es una crítica a que es algo que las personas se toman muy en serio, este constructivo inventado que debe ser de cierta forma pero con cualquier crítica se desmorona”.
La honestidad de Maremoto, la manera en que desnuda la vulnerabilidad con sus imágenes en un mundo en el que pareciera que todos somos rebosantemente felices en las redes sociales, es disruptiva. Ah, y también es un respiro…