El pulque es, sin duda alguna, patrimonio de México y de la humanidad. Esta bebida legendaria ha existido desde los tiempos de las culturas mesoamericanas, y es parte de una herencia milenaria y sabia. Más allá de su clasificación como bebida alcohólica, el pulque tiene muchas propiedades nutricionales y medicinales. Además, los pueblos prehispánicos lo consideraban una bebida sagrada, la cual podía comunicar a los sacerdotes con los dioses.
Por todo esto, uno se imaginaría que los primeros registros fílmicos sobre su elaboración habrían corrido a cargo del gobierno mexicano. Sin embargo, no fue así. Fueron nada más y nada menos que los nazis quienes produjeron el primer documental sobre el pulque. Los intereses del movimiento fascista alemán no están del todo claros, pero se especula que tal vez tenían que ver con las investigaciones del gobierno nazi sobre rasgos nacionalistas de diversas culturas.
A fin de cuentas, conocer los símbolos plenamente identitarios de otros países podría haber aportado conocimiento importante para los fines del partido nacional socialista. Sin embargo, también es muy probable que Hitler buscara introducir un equipo de espionaje a México, debido a su cercanía con Estados Unidos. La filmación de un documental sobre el pulque sería una buena fachada para ocultar los verdaderos objetivos subyacentes.
Más allá de la historia, el propio documental es interesante. Consta de apenas nueve minutos, filmados por el prolífico cineasta Hubert Schonger, los cuales dan cuenta de la extracción rudimentaria del aguamiel del corazón de los magueyes. La cinta, en blanco y negro y sin sonido, muestra a los tlachiqueros de Puebla y del valle de Apan, Hidalgo, durante una jornada laboral.
La película permaneció enterrada durante más de 70 años, pero un coleccionista mexicano la logró recuperar. Javier Gómez Marín, funcionario de la Secretaría de Cultura, la obtuvo en una subasta por un precio aproximado de 4 mil pesos. Javier se dedica a coleccionar todo aquello que tenga que ver con el pulque, en un intento por preservar la historia y la relevancia de esta importantísima parte de la gastronomía y medicina tradicional mexicanas. Gracias a sus esfuerzos, se logró recuperar una pieza clave de la cultura de nuestro país.
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*Imagen destacada de: El País