Como ustedes ya lo han notado en mis artículos anteriores, siempre acompaño mis publicaciones con un video original sobre el mismo tema. Así, ambos medios giran en torno a un solo objetivo complementándose mutuamente… Pero en esta ocasión, la "novedad" que les comparto es que, en lugar de un solo artículo, les presentaré una auténtica trilogía: tres videos diferentes y tres escritos distintos enfocados en mis experiencias durante los (si, acertaron!) tres días que pasé en la comunidad de Xamagé, ubicada en el estado de Hidalgo.
Así, mientras que en los videos que les mostraré -casi a manera de un "diario de viaje"- las actividades del día a día durante mi estancia en dicho pueblo, misma en la que documenté una "curiosa" festividad y busqué su relación con las "Batallas Rituales" y los sacrificios humanos; en los escritos realizaré algunas reflexiones personales en torno al turismo en los "pueblos mágicos" y esa variante del viajero moderno, cada vez mas en boga y que se denomina como "turismo alternativo” y mas acertadamente, en el caso de esta narración, como "turismo rural".
Entrando ya en materia, la primera parte de esta trilogía la titulo "La Fiesta del Pueblo"… Y justamente se trata, ¡simple y llanamente! de esto: una fiesta que pudiera ser "una más" de entre tantas otras que se realizan en los miles y miles de pueblos a lo largo y ancho de nuestro México, y que me parece que es un pretexto perfecto para entrar de lleno en el tema del turismo rural.
Antes de avanzar debo dejar en claro que Xamagé no es un "pueblo Mágico"… Es más; ¡ni siquiera es un pueblo que pudiéramos ubicar como parte de algún circuito turístico! Su infraestructura para recibir a visitantes es nula (Con decirles que el hotel mas cercano se encuentra en la cabecera municipal, ubicada a unos cuantos kilómetros de distancia).
Pero entonces… ¿Cuál es el atractivo de esta comunidad? Para mi es fácil definirlo en una sola palabra: su autenticidad.
Un año atrás, cuando al iniciar mis colaboraciones en este espacio me solicitaron un breve (brevísimo!!) curriculum, yo me definí como un "viajero poco tradicional". La razón de este calificativo es que mientras a la gran mayoría de mis conocidos les gusta viajar invariablemente a centros vacacionales y preferentemente al "destino de moda", yo prefiero visitar y conocer destinos "apartados". En este sentido, la siguiente definición de "turismo rural" me parece muy acertada para la clase de viajes que me gusta realizar:
El turismo rural es el lado ma?s humano del Turismo Alternativo, ya que ofrece al turista la gran oportunidad de experimentar el encuentro con las diferentes formas de vivir de las comunidades que cohabitan en un ambiente rural y adema?s lo sensibiliza sobre el respeto y valor de su identidad cultural"*
Si ustedes ya tuvieron oportunidad del ver el video de este escrito, de inmediato notarán (más allá de las anécdotas personales) que les muestro un aspecto más "intimo" de la vida de los habitantes del pueblo de Xamagé, en el sentido de que presento los trabajos y preparativos que las personas de la comunidad realizan desde un día antes de la gran fiesta en su pueblo.
Así, en este viaje que ahora ya podemos definir claramente como de "turismo rural", convivimos e interactuamos con la comunidad, siendo partícipes de los arreglos de la iglesia, bailando al son de la música de la banda local y comiendo tacos de tripa cocinados en un perol ubicado justo a un lado de un improvisado altar donde las mujeres le rezan al Santísimo…
Sin embargo, realizar este tipo de turismo no es tan fácil como planear las típicas vacaciones…
De esto les platicaré en la segunda parte de esta trilogía…
*Ve más videos como este en el canal Somos Nómadas en YouTube.