La versión de la historia que es inculcada en las escuelas, generalmente corresponde a la percepción de los victoriosos. Y ahí es cuando el arte salva muchas de las versiones no escuchadas, como sucede con un bellísimo biombo guardado en el Museo Franz Mayer en la Ciudad de México.
Esta hermosa pintura describe una vibrante vida en lo que hoy es la Ciudad de México luego de la llegada de los españoles, y de hecho algo de tiempo después ya que este fue elaborado en el siglo XVII.
Este biombo se llama Biombo de la Conquista de México (1690). Por uno de sus frentes muestra escenas de la conquista, aunque en su reverso una panorámica de la Ciudad de México.
En algunas de las escenas se desprende la enorme significación mexica. Por ejemplo, mientras se ilustra la procesión del día del Corpus Cristi se ejemplifica también la celebración indígena, pero muy a modo de los "mitotes" las fiestas mexicas por excelencia, donde el baile y una enseñanza oral, como un gran performance, sucede.
Si la conquista se dio, es bien sabido que los antiguos mesoamericanos conservaron muchas de sus costumbres, aunque muchas veces disfrazadas de catolicismo. La ciudad se vivió bajo el aura de las costumbres mexicas durante varios siglos, incluso hasta hoy sobrevive mucho de su culto, sobre todo asociado al calendario agrícola.
Ve más de cerca las imágenes del biombo en este link.