Joan Fontcuberta es un artista, docente, ensayista, crítico y promotor de arte enfocado en la fotografía. Es una de las figuras más interesantes e innovadoras en su campo, ya que la posición que adopta ante su profesión es una de escepticismo. Promueve el cuestionamiento constante, la no aceptación de absolutos y el desdoblamiento de una realidad que parece sólida pero que dista de serlo. Apela a la conciencia crítica del espectador, invitándolo a poner en tela de juicio el concepto de lo que es real, demostrando que no es sino un constructo mental que depende del contexto y la perspectiva.
En marzo de este año, Fontcuberta presentó en la Ciudad de México su trabajo más reciente: Mictlán. Como su nombre lo indica, sus intervenciones intentan capturar momentos relacionados con la muerte o con una cualidad obscura de la vida. Sin embargo, el fotógrafo empuja el concepto de inframundo más allá; fiel al imaginario mexica, su enfoque es sutil y lleno de matices. En la mitología prehispánica, el Mictlán es el lugar al que iban aquellos que morían de muerte natural, ya fueran nobles o macehuales.
Los espíritus debían atravesar nueve niveles, los cuales expresan la descomposición orgánica de los cuerpos. Si llegaban al final, podían liberar su energía vital, su tonalli, descansando por fin ante los señores del inframundo: Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl. No obstante, el Mictlán no era simplemente una representación de la muerte: también era un lugar de creación, renovación y cambio constante. De hecho, el mito sobre la creación del hombre se sitúa en el Mictlán, donde Quetzalcóatl lo moldea a partir de unos huesos sagrados.
Fiel a la miríada de simbolismos que ostenta el inframundo mexica, Joan Fontcuberta fabrica momentos que sugieren algo velado, tal vez más allá de nuestro entendimiento, pero que, a la vez, es más cercano a nosotros de lo que imaginamos. El fotógrafo presenta conceptos clave que fungen como hilos conductores a través de la exposición: la memoria, los vestigios de la imagen y sus vínculos con la realidad.
Los archivos fotográficos que componen Mictlán fueron recopilados en Pachuca, Mérida y la Ciudad de México durante el 2019. Fontcuberta no se contenta con apresar imágenes, sino que también las interviene, para jugar con su significado aparente y convertir a sus fotografías en una especie de caleidoscopio, más que un instante en el tiempo. En sus propias palabras: "me apropio de los archivos para extraer otros sentidos abocados a la narrativa de la postmemoria".
Si lo tuyo es más el cine, échale un ojo a esta iniciativa.
*Imagen destacada de: Joan Fontcuberta