Solemos concebir al océano como una masa uniforme, donde encontraremos una enorme variedad de especies biológicas pero ¿sabías que ahí adentro existen también montañas, volcanes, e incluso lagos?
Este último se trata de un fenómeno muy extraño y bello. Las cualidades del agua ocasionadas por sus minerales hace que ésta presente distintos tipos de densidad, y cuando la diferencia es muy grande, entonces se forman ecosistemas acuáticos con múltiples distintivos. De esta manera es posible entrever un lago en el océano, que incluso presume sus inesperadas y propias playas.
En el Golfo de México, a casi 200 metros bajo el agua, fue encontrado un lago. Un grupo de científicos recorría en el área de la Península de Yucatán las aguas, explorándolas, cuando sus linternas que iluminaban el oscuro océano se toparon con la súbita luminosidad de un lago profundo. Con sus propias playas y moradores.
El nivel de salinidad de este lago es altísimo y cuando un cuerpo lo habita este último flota con una enorme fuerza que lo impulsa hacia fuera, como un trampolín. Por ello ahí solo viven moluscos y crustáceos.
Son como albercas en el océano y son resultado del desplazamiento de placas tectónicas de sal en el periodo jurásico.
*Imágenes: atlasobscura.com