Antes de que el plástico inundara el mercado, ingeniosas técnicas y materiales eran usados para hacer miles de artículos. Por ejemplo en México, previo a la independencia, las personas comunes difícilmente podían acceder a las costosas muñecas de porcelana que eran traídas de Europa, y así inició la linda tradición de las "Lupitas", conocidas también como muñecas de cartón: hoy sobreviven y su historia tiene ya más de 200 años.
Su origen específico no está ubicado, pero comenzaron a producirse en grandes cantidades sobre todo en la Ciudad de México y en Celaya, Guanajuato, a base de papel maché, una técnica originaria de India, China y Persia.
Hombre vendiendo muñecos de cartón. Archivo Casasola, Ciudad de México 1920-1925.
El Método
Es curioso porque esta tradición se inició espontáneamente dentro de diversos hogares, y lo más natural habría sido que cada cual hiciera su propio diseño. Sin embargo, este fue unificándose con el tiempo hasta adoptar la figura que hoy todos conocemos. Y gracias a este fenómeno terminarían consagrándose y trascenderían en el tiempo.
En su producción son empleados unos moldes donde se coloca la masa de papel maché. Esta última se obtiene primero remojando trozos de papel y luego revolviéndolos con engrudo. Cuando están secas las partes de la Lupita en el molde, entonces se les hace un agujero a cada una y se unen con hilos.
Luego son pintadas a mano con pintura vinílica; sus colores son quizá su cualidad más importante. Su ropa, un conjunto de pantalones cortos, generalmente lleva flores de diseños otomíes. El color de su piel suele ser el de un carne muy parecido a un rosado y sus ojos son enromes al igual así como sus pestañas. Su cuerpo es algo llenito, quizá como las mujeres de antes cuyo cuerpo ideal era más curveado. Y en cuanto a su estética podríamos decir que es, sobre todo, simpática –algo así como tiernas y alegres mujeres de otra época.
Las Lupitas/Bordado de Ana Paula de la Torre Díaz
Las Lupitas hoy
Como intuirás, su nombre viene de uno de los apodos cariñosos a la Virgen de Guadalupe, aunque en ocasiones se les conoce simplemente como muñecas de cartón, y llevan su propio nombre inscrito en su ropa. Las siguientes fotografías fueron tomadas recientemente en una calle del centro de Coyoacán en la ciudad de México. Esta costumbre persiste porque su originalidad las ha consagrado como una de las artesanías predilectas; una Lupita en tu casa siempre le dará más alegría y gracia.
*Imágenes: Archivo Más de Mx