No hay punto en negarlo: todos los rincones de México tienen algo mágico. La razón detrás de esto posiblemente es que lo genuinamente maravilloso de este país es su gente y las increíbles e infinitas manifestaciones culturales que nos regalan. Además, tenemos la fortuna de habitar una tierra que desborda en su biodiversidad. En este país es difícil escapar de la belleza.
Sin embargo, el título de Pueblo Mágico que se han llevado 121 municipios mexicanos pretender reconocer algo muy particular: la forma en que los pobladores y las administraciones contribuyen al cuidado de las historias, las costumbres y el entorno de su localidad. Cuando estas se pulen y presentan como preciosas joyas que todos deberíamos conocer, el valor se vuelve explosivo.
Claro que hay muchos sitios así, donde la gente que los habita hace todo lo que puede por cuidar los pequeños rincones y las ricas tradiciones con las que crecieron. Por eso celebramos que se otorguen reconocimientos a estos esfuerzos.
Recientemente fueron nombrados "Pueblos Mágicos" 10 municipios de distintos estados. En cada uno hay cosas imperdibles y por eso te compartimos todo lo que tienes que saber.
Nombre de Dios, Durango
Este sitio se guarda 2 grandes atractivos: sus hermosos recintos naturales y su increíble arquitectura virreinal. De la última hay, como muestras, 5 iglesias y una ex hacienda (la de Juana Guerra). Pero si prefieres estar al aire libre, las cascadas de 20 metros de "El Saltito" y el hermoso ojo de agua que se alimenta de el río Tunal, te dejarán fascinado. Este lindo pueblo también es conocido por las conservas y licores de fruta y dulces cristalizados hechos con lo que se cosecha en la hiper fértil tierra de este oasis.
Tlaquepaque, Jalisco
El pueblo de Jalisco tiene bien merecido el reconocimiento por ser una efervescente capital mexicana de la tradición artesanal, especialmente de la cerámica y la alfarería. Hay distintos puntos del municipio que tienes que visitar, entre ellos: el Jardín Hidalgo; El Parián, donde puedes comer delicioso y echarte un auténtico tequila; el Museo Pantaleón Panduro de cerámica y el Regional de Cerámica y el de Alfarería. Si eres amante de la arquitectura, no te puedes perder el Santuario de Nuestra Señora de la Soledad y la Parroquia de San Pedro.
Zimapán, Hidalgo
Este flamante Pueblo Mágico combina riqueza natural y fantástica arquitectura colonial, como la de la preciosa Parroquia de San Juan Bautista, el ex convento Misión Tolimán y la Ex Hacienda La Estancia.
Si de naturaleza se trata, tienes que visitar el Cañón del Infiernillo, un hermoso cuerpo de agua artificial; la Villa de la Encarnación, una preciosa villa donde se cultivan manzanas, piñones y frutos del bosque y truchas; el Parque Nacional de los Mármoles; la presa del Infiernillo; el cañón de San Cristóbal; el Caracol del Carrizal que es una serie de extravagantes formaciones rocosas.
Comonfort, Guanajuato
Este sitio desborda cultura y sitios increíbles. Tienes que visitar la parroquia de San Francisco, el Museo Doctor Luis Mora (en donde puedes ver piezas arqueológicas de sitio). Además, podrías experimentar increíbles fiestas tradicionales, que incluyen danzas, palenques, mucha música y comida. La gastronomía es variada, pero la especialidad son las carnitas de puerco.
Amealco, Querétaro
Hay mucho que visitar en este lindo pueblo llamado Amealco por ser tierra de manantiales. Además, si te gustan las artesanías necesitas visitarlo. Hay una larga tradición de tejedoras que hacen preciosos textiles de lana. La comida también es fantástica: se come una deliciosa barbacoa y dulces como ate de membrillo, manzanas cristalizadas y un fantástico pan.
Melchor Múzquiz, Coahuila
En este pueblo mágico se mantienen las tradiciones de los indígenas kikapoo, que se rigen por sus propios usos y costumbres y prácticas religiosas. ¿Qué ver? Si quieres naturaleza tienes que visitar el manantial de Nacimiento, La Cascada, el Río Sabina. Si quieres historia: tienes que buscar la Iglesia de Santa Rosa de Lima, el monumento a Don Benito Juárez y el Museo Municipal. La fiesta más importante del pueblo es la celebración anual de "La Primera Luna", una celebración indígena.
Compostela, Nayarit
El atractivo central de este pueblo mágico son las playas, por supuesto. Pero también puedes visitar los museos de sitio donde se exhiben piezas arqueológicas de la zona; vivir las fiestas patronales; buscar la perfecta pieza de talabartería (que es tradicional en la zona) o comer un tradicional festín de mariscos o una carne asada.
Aquismón, San Luis Potosí
Además del lindo templo de San Miguel Arcángel, en este pueblo de la Huasteca, lo que más se disfruta son los espectaculares sitios naturales, entre cuevas, cascadas y sótanos, destacando el extravagante sótano de las golondrinas.
Bustamante, Nuevo León
La naturaleza es el plato principal: inmensas grutas con curiosas formaciones, el precioso balneario "El molino" y la ruta "El cañón", que sigue la ribera de un hermoso río. Para el postre: el delicioso pan dulce que se hace solo en seis panaderías tradicionales del municipio, pero se disfruta en todo el estado.
Guadalupe, Zacatecas
Entre la catedral, museos y la plaza principal, Guadalupe es el destino ideal para los amantes de la arquitectura. Además, el pueblo es conocido por sus yacimientos de minerales (como plata y cobre) y los bancos de cantera y caliza. Así, las artesanías son realmente fabulosas: esculturas, labrados en cantera, piezas de ónix y cerámica. Para comer hay birria, carnitas, gorditas, aguamiel, las famosas melcochas, queso de tuna y dulces de leche.