Mineral del Chico es famoso por sus bosques de coníferas, tan bellos, que es una de las zonas naturales protegidas más antiguas de México. Porfirio Díaz declaró a El Chico como Bosque Nacional en 1898; este hermoso lugar forma parte de la Sierra de Pachuca, en Hidalgo.
Hace quinientos años aquí también proliferaron las minas, por ello nació el pueblo también conocido como Mineral del Chico, y hasta 300 minas fueron instaladas en los derredores.
Sus bosques de coníferas son muy antiguos: ahí yacen helechos que, por su tamaño, parecieran prehistóricos, en mancuerna con cientos de encinos hermosos cuyos tonos resultan una extensa gama de apacibles colores otoñales. Sus formaciones de roca conocidas como Las Monjas son por demás singulares. También, formaciones de roca hacen uno de los laberintos naturales de México más intrincados y famosos (aquí se escondían los revolucionarios): El Contadero.
Con todas estas maravillas, un lugar más discreto, poco conocido, y accesible solo con guía a través del bosque, se descubre luego de un delicioso descenso que puede hacerse a caballo.
Nos referimos a espejos de agua en las faldas de la montaña, que cobijan la base de enormes montículos de piedra; la vista salta hermosa con geometrías que parecieran guardar una capa de metal en su superficie, y que reflejan las rocas que las habitan; estas últimas forman pasillos que jamás se escapan del reflejo (su onírico cimiento).
El elgantísimo minimalismo del sitio es un recuerdo que querrás tener en tu vida.
*Imágenes: Archivo Más de Mx