Tenía razón Aldous Huxley: después del silencio, quizá la cosa más cercana que puede expresar lo inexpresable es la música. En ese poder cautivante que tiene este arte, siempre da gusto celebrar los sonidos que nacen, se inspiran, reviven y recrean en México –porque si existiera un lugar tan flexible como lo es el arte, sería este país–. Entre su diverso paisaje sonoro, encontramos a Nada.
Esta banda originaria de Monterrey está conformada por Leila Ibarra y Ricardo Ramírez. Si algo se puede decir de Nada es que ha logrado diseñar una huella digital sonora; una vez que la escuchas, difícilmente la confundirás con otra. Detrás de cada canción se percibe la dedicación y el cuidado que invierten en todo lo que hacen. Hay talento, sin duda, pero también mucha experiencia. Son exmiembros de la banda independiente Abeja y creadores y organizadores del festival MTYMX (que por desgracia se desintegraron por la ola de narco en el estado), entre otras cosas.
Agresiones, tensiones y resistencias sonoras se liberan con suavidad entre los lamentos de su nuevo álbum "Fin". Los miembros de Nada se declaran amantes del cine de terror, quizá por eso se perciben atmósferas oscuras intrigantes que, por instantes, secuestran los sentidos.
Siendo el resultado de casi tres décadas de hacer lo que les gusta, otro elemento que vale destacar de su nuevo álbum es que es una experiencia integral: no hay que dejar de ver los videos –que, cargados con información visual, revelan aspectos de cada una de las canciones. Por ejemplo, el que realizó Elisa Malo para la pieza de "Niebla". Al final, Nada se trata de una banda que nos invita a sumergirnos en ensoñaciones oximorónicas de paz y angustia, de horror y belleza.
Fin
- Música y letra: Nada
- Leila Ibarra: voz, bajo y sintetizadores
- Ricardo Ramírez: batería, guitarra y sintetizadores
- Colaboración de Lo Obsoleto: batería en Niebla y Gato, sintetizadores en Niebla y Olvido
- Grabado: Lo Obsoleto
- Mezcla: Nada
- Master: Mikey Young
- Ilustración de portada: José Antillón