Desde hace milenios el hombre ha intuido, y comprobado, que vivimos bajo la influencia del cosmos. Lo que ocurre “allá afuera”, incide de forma significativa en nuestro planeta –un ejemplo simple es la relación entre las fases lunares y las mareas– y quizá también en el rumbo de nuestra existencia (al menos esta es la premisa ancestral de la astrología y de diversas tradiciones y creencias).
Aunque cuestionados por muchos, algunos con argumentos por lo menos interesantes, históricamente los horóscopos (interpretaciones puntuales de la relación entre los astros y la vida de una persona, su salud, destino y personalidad, entre otros aspectos) han resultado de gran interés para millones de personas. Lo anterior se debe, tal vez, a la necesidad del hombre por entender la existencia.
Difícil pensar en una cultura que haya entablado una relación más sofisticada, precisa y, vale decirlo, estética, con los astros, con su movimiento, que la Maya. Demasiado interesados en el tiempo, los mayas desarrollaron hasta 16 calendarios, entre los que destacan el Haab (solar), de 365 días compuesto por 18 ciclos de 20 dÌas, y un período uayeb de 5 días (considerados como “fuera del tiempo” y dedicados a rituales específicos); la Cuenta larga, con una duración de 5,125 años y el Tzolkin, de carácter ritual y dividido en trece veintenas (260 días), y el Tzolkin, de carácter ritual, agrícola, y dividido en trece veintenas (260 días).
El horóscopo maya
Desde hace décadas los calendarios mayas, en particular el Tzolkin, han sido retomados por numerosos grupos esotéricos. las inquietudes astrológicas que ha demostrado el ser humano se conjugaron de forma intensa con la riqueza calendárica de esta brillante cultura, y esto aunado a la fiebre evolutivo/apocalíptica alrededor del 2012 facilitó la germinación de múltiples adecuaciones e interpretaciones, generalmente poco precisas.
Si bien es muy probable que los mayas conjugaron los 20 días (kines) del tzolkin, con los 13 periodos o meses par determinar las particularidades o propensiones de un cierto día, sería difícil referirnos, en sentido estricto, a un horóscopo maya. En todo caso, existen numerosas interpretaciones que, a fin de cuentas, han masificado el interés por entender o al menos acercarnos al “misticismo matemático” de esta cultura –fenómeno que ciertamente tiene un doble filo–.
En respuesta a a este interés, y con la esperanza de incentivar un acercamiento genuino del público a esta brillante cultura mesoamericana, decidimos compartirles un “horóscopo maya”, referido por Álvaro H. Pescador en su ensayo “El Tzolkin, Glifos Solares y Tonos Galácticos”. Cabe advertir que se trata de un ejercicio, al menos en apariencia, poco ortodoxo o estrictamente cuestionable. Así que los invitamos a concebirlo más como una ventana lúdica a la cosmología maya, la cual merece una dedicación mucho más estudiada y paciente.
En los siguientes cuadros, extraídos del mismo ensayo, encontrarás la relación de las fechas de tu nacimiento con tu tipo de horóscopo maya desprendido del calendario Tzolkin. Más abajo están desglosadas las particularidades de los horóscopos.
Murciélago
La fortaleza es quizá el signo más importante de este signo. Por no tomarse la vida demasiado en serio, el murciélago destila seguridad y por ello es un líder nato, de hecho está casi siempre destinado al poder, ya sea como líder de una empresa o grupo. Sabe mucho lo que quiere, por ello siempre lo consigue.
Escorpión
La meticulosidad quizá sea su carcacterística más importante. Los escorpiones son abiertos aunque generalmente son de ideas rígidas, por ello pueden escuchar, aunque pocas veces cambiarán de parecer. Son personas discretas y generalmente hablan cuando lo que tienen qué decir es de importancia. Les gustan las tradiciones y en cuestiones de pareja prefieren la estabilidad.
Venado
Es el más sensible de todos los signos del zodiaco maya. El ciervo nació para dar y recibir amor. Por un lado es una gran virtud, aunque por otro son muy vulnerables, las demás personas pueden herirlas fácilmente. Es un signo coqueto, es muy común que tomen tiempo para vestirse o arreglarse. Son curiosos y alegres.
Lechuza
Son personas muy muy intuitivas y por ello guían sus decisiones. Suelen tener buenas reflexiones y saben qué decir en el momento correcto, hacen sentir bien a las personas y están rodeadas de amigos. Por ser soñadoras y reflexivas sienten atracción a las bellas artes y los asuntos intelectuales.
Pavo Real
Es el signo más carismático de este zodiaco. Son muy extrovertidos, generalmente son el centro de atención. Su sentido del humor y carácter los hace muy populares entre sus amigos. Son muy originales y de algún modo están siempre buscando la manera de ser únicos. Son asimismo muy coquetos aunque en el amor les gusta sentirse completamente amados y valorados por sus parejas. Suelen vivir cabalmente el momento.
Lagarto
Por su alta capacidad de adaptación son personas que buscan la sabiduría en diversos lugares, por ello echar raíces es uno de los temas que más les cuesta trabajo. Son personas muy ordenadas, simples y sencillas. En el amor les gusta la estabilidad, aunque pareciera una paradoja pues su búsqueda cambiante complica lo anterior. Son personas leales, serviciales y generosas.
Mono
Son personas que aman la diversión y la actividad. Son muy seguras de sí mismas. De tanta acción en ocasiones olvidan ser reflexivas, aunque cuando saben lo que quieren siempre lo consiguen. Están rodeadas de personas por su carácter positivo y alegre. Tienen mucho miedo al compromiso en el amor.
Halcón o Águila
Ama la libertad. Tiende a ser muy independiente y entre sus grandes virtudes destacan la paciencia y la precisión, lo que los hace muy perfeccionistas. Una de las consecuencias y su capacidad de perfección es que de alejarse mucho de los demás pueden ser muy tercas. Pueden además observar a distancia los problemas, en el caso de los ajenos, al no meterse, tienden a ser verdaderamente buenos consejeros. Con inclinaciones a la filosofía y a la teología, son grandes conversadores y suelen ser muy cultos.
Jaguar
Pasionales y fogosas. Al igual que este animal son muy decididos y tanto con las personas como con las metas en la vida suelen hacer lo que puedan para conseguir aquello que desean. Les encanta la conquista y son excelentes amantes. Valoran mucho la independencia y las situaciones de riesgo; aman la adrenalina.
Zorro
Quizá la solidaridad sea su virtud primigenia. Desde pequeños están pensando siempre en cómo ayudar a los demás. Suelen tener buena suerte. Su vocación, naturalmente, va orientada a una de servicio, como la medicina. Sus ambiciones suelen ser muy tradicionales, como el formar un hogar y una familia.
Serpiente
Son personas con un encanto especial. Aman estar perfectas, el glamour y los lujos. Son muy decididas y claras, por ello consiguen siempre lo que buscan. Aunque aman su libertad, en el amor les encanta sentir cariño y protección.
Ardilla o Conejo
Su principal cualidad es la facilidad de comunicación y las personas suelen tomarles cariño muy fácilmente. Son alegres y disfrutan mucho de la actividad. En ocasiones, cuando hablan mucho, pueden no pensar antes lo que dicen y crear malentendidos o mitos. Disfrutan las conversaciones y buscan una pareja para toda la vida.
Tortuga
Son amantes de la armonía y el hogar. Rehuyen a los problemas y conflictos. La estabilidad es muy importante para ellos. En el terreno intelectual pueden llegar a ser muy inteligentes, y ello solamente observando la cotidianidad y su sabiduría intrínseca.